Asco

En mi habitual y particular asco hacia el ser humano, hoy manifiesto mi repugnancia profunda a las personas que construyen sus vidas sobre mentiras, y a través de ellas hacen daño a los demás.
No merecen más que lo que dan. No merecen ser queridos. No son dignos de considerarse personas. Ni animales, que los animales son en muchas ocasiones mucho más nobles que nosotros, que les miramos por encima del hombro desde nuestra supuesta racionalidad.

No prometas nada que no puedas dar, pues nada te han pedido.

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Comprende amor,
no me dejan regresar
Compréndelo
mientras dejas de llorar
¡Qué no daría yo
por volverte a abrazar!
Comprende, amor,
no me dejan,
no me dejan regresar
Habrá que esperar
la fiesta al final.

__(La carta que no... - Los Enemigos)__